Full Metal Alchemist

Esta es la historia de los hermanos Elric, Edward y Alphonse, que en un intento por resucitar a su madre igronraron la prohibición de transmutar cuerpos humanos usando la alquimia. A causa de esto, Edward perdió un brazo y una pierna y Alphonse perdió su cuerpo entero, condenando a su alma a estar confinada en una armadura. Ahora ambos buscan la piedra filosofal, con la esperanza de que aumente sus propios poderes alquímicos lo suficiente para recuperar sus antiguos cuerpos. Para ello, Edward se convertirá en alquimista nacional y poder así acceder a los recursos alquímicos del ejército. Pero mucha más gente busca la piedra filosofal, cada cual con sus propios motivos y pocos de ellos prestarán atención a los inocentes que se crucen en su camino...

En una palabra: genial. Pocas veces se ve un guión que no se tuerce a gusto del que lo está viendo y a su vez y paradójicamente gusta tanto. La historia de los hermanos Elric no es siempre alegre, no ganan siempre los buenos y Edward Elric no es el mejor, simplemente es bueno y decidido, aunque sigue siendo un adolescente con sus limitaciones. Las cosas pasan cuando tienen que pasar y no para agradar al espectador, sino simplemente porque tienen que pasar. La mayoría de los personajes tienen un papel bien definido y están donde deben estar, hacen lo que tienen que hacer y mueren si deben hacerlo.

Cosas malas (por sacarle algunas): la series es larga y a veces hace pensar que de un momento a otro vas a perder el hilo porque están pasando demasiadas cosas que no se han explicado aún. Con paciencia se soluciona, la historia nunca llega a ser extremadamente liosa. Y el final, después de 51 capítulos me vienen con la explicación fácil... ¡Anda ya! Sin embargo tampoco deja de ser un buen final, después de todo.